Comarca de Gordón

[Yosco]

XXXVII Convención de El Farolillo.

Puede parecer casi nada, ¡pero El Farolillo y su Convención anual del 5 de enero llevan 37 convocatorias!

No he podido averiguar a quién miró el caballo este año, pero el aire festivo que se respira en el documento gráfico y el buen humor de las coplas lo dicen todo. Lo del caballo es una anécdota muy simpática que me contaron en la Pola estas navidades. Al parecer, andando los años sesenta, si no recuerdo mal, llegaban ocasionalmente al pueblo compañías de titiriteros y algún circo que otro, sobre todo en las fiestas. Uno de estos circos traía un caballo que pasaba por ser muy observador e inteligente y que, mirando a la gente, era capaz de adivinar algunos secretillos o no tan secretillos de las personas. Así, dando vueltas alrededor de la pista, el amo preguntaba, ¿quién es la mujer más fea del pueblo?, y el caballo se detenía y fijaba la mirada en una asustada espectadora. El dueño, para no dejar lugar a confusiones tontas, matizaba añadiendo, por ejemplo, ¿es la que está en la tercera fila con vestido de cuadros?, a lo que el caballo respondía moviendo afirmativamente la cabeza. El público estallaba en risas y la afectada, cabreada y avergonzada, miraba a todas partes como diciendo esto no va conmigo. Y todo lo veía y disfrutaba con mayor regocijo un vecino del pueblo con fama de beber bien y excederse más de la cuenta con la bota de vino; éste se desternillaba de risa dándole la razón al caballo y comprobar que la aludida no podía, efectivamente, presumir de guapa.

Pero el caballo siguió dando vueltas y el amo preguntó, ¿y quién es el más borracho de todo el pueblo?. Al oir la pregunta, nuestro vecino se quedó paralizado, quieto quieto como para no hacerse notar, vigilando al caballo de reojo que seguía avanzando hasta ponerse a su altura. Y el caballo se paró -exclamaba explicando lo sucedido nuestro protagonista- y el muy jodido me miró. Y cuando pensé que iba a seguir, el amo le preguntó, ¿es aquel de la boina y pantalón de pana de la segunda fila?, y el muy cabrón empezó a mover la cabeza diciendo que sí, y el amo le volvió a preguntar, ¿estás seguro?, y el caballo que sí... ¡joder, con el caballo, qué listo era!

Inspirados en esta anécdota que tiene nombres propios, aunque no he querido mencionarlos ya que en la Pola es de dominio público y lo que interesa es la historieta, la agrupación de El Farolillo elige a hora avanzada de la convención, a aquel de sus parroquianos a quien miró el caballo esa noche, como parte de uno de los ritos y costumbres de dicha convención.

Esata celebración de comienzo de año y víspera de reyes es algo muy especial que pone de manifiesto no solamente las ganas de divertirse y recibir con la mejor de las alegrías el año entrante, sino también la fidelidad de la amistad y la capacidad de imaginación de nuestros paisanos. ¡Que vaya por otras 37 convocatorias más!
Salud.
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Bitácora LUCERNARIOS:
Acerca de la luz por la poesía.
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